El arte abstracto es
un movimiento artístico que surgió alrededor de 1910 y cuyo propósito
es prescindir de todos los elementos figurativos, para así concentrar la
fuerza expresiva en formas y colores sin ninguna relación con la
realidad visual.
Tres movimientos artísticos que contribuyeron al desarrollo del arte abstracto fueron el Romanticismo, el impresionismo y el expresionismo. A
lo largo del siglo XIX se consiguió la independencia de los artistas.
El mecenazgo de la iglesia disminuyó y el privado del público fue más
capaz de proporcionar una forma de vida para los artistas.
En
la pintura abstracta, la obra de arte se convierte en una realidad
autónoma, sin conexión con la naturaleza y, como consecuencia, ya no se
representa hombres, paisajes, casas o flores, sino simplemente
combinaciones de colores que intentan expresar la necesidad interior.
Una de las características principales de la pintura abstracta es el uso
de un lenguaje sin forma y la libertad cromática. Es un concepto general, opuesto al concepto de arte figurativo, que remite a lo más esencial del arte, reducido a sus aspectos cromáticos, formales y estructurales.
Un influyente artista estadounidense y un referente en el movimiento del expresionismo abstracto fue Jackson Pollock. Durante su período de formación conoció la pintura de los muralistas mexicanos, que le impresionó hondamente. Comenzó su carrera con obras figurativas, en las que presta ya particular atención a los valores matéricos y el cromatismo. Hacia 1938 empezó a interesarse por la pintura abstracta e irracional, y para las obras de este período buscó inspiración en el mundo de los indios americanos.
El
año 1947 fue decisivo en su trayectoria, ya que fue cuando adoptó la
peculiar técnica del dripping: en lugar de utilizar caballete y
pinceles, colocaba en el suelo el lienzo y sobre él vertía o dejaba
gotear la pintura, que manipulaba después con palos u otras
herramientas, e incluso a veces le daba una gran consistencia mediante
la adición de arena e incluso fragmentos de vidrio.
A
partir de la década de 1950, simultaneó la pintura abstracta con obras
figurativas o semifigurativas en blanco y negro, pero su nombre ha
pasado a la posteridad, sobre todo, en relación con los grandes lienzos
abstractos de vivo colorido, donde los trazos se entrelazan hasta formar
una trama densa y compacta (una especie de maraña) de gran impacto.
exelente informacion
ResponderEliminar